Estrógenos
Son
las hormonas responsables de las curvas femeninas. En realidad son un
grupo de hormonas como el estradiol, estriol y estrona. Son las
responsables de que las mujeres parezcamos mujeres. Por su acción, las
mujeres somos más propensas a acumular grasas en las caderas y los
senos, pero no debes odiarlas porque los estrógenos hacen que las
mujeres seamos menos propensas a los problemas cardiovasculares. Regulan
el metabolismo de las grasas en la sangre, manteniendo altos los
niveles de colesterol HDL (bueno) y protegiendo a las mujeres del riesgo
de infarto. También regulan tu apetito sexual. Se encargan de mantener
los huesos fuertes, impidiendo la salida del calcio de los huesos.
Durante la menopausia disminuyen los niveles de estrógenos, los huesos
pueden volverse más frágiles y el corazón de las mujeres pierde esa
protección extra. Por ello, es muy importante que las mujeres realicen
ejercicio durante toda su vida, para mantener huesos fuertes y arterias
sanas.
Para
tu vida deportiva los estrógenos te ayudan a mejorar tu velocidad y tu
fuerza explosiva a partir de la energía rápida del músculo o ATP. Por
eso se suele recomendar a las mujeres que realicen ejercicios intensos
como series o sprint, los días después de la ovulación.
Progesterona
Esta hormona aparece después de la ovulación y también prepara al útero para la fecundación. Cuando esta no tiene lugar, disminuyen los niveles de progesterona y se produce la menstruación. La
progesterona también interviene en la acumulación de grasa en las
adolescentes y en el desarrollo de los pechos, es la responsable del
aumento de tamaño de los pechos antes de la menstruación y durante el
embarazo. Puede provocar una ligera retención de líquidos los días antes
de la regla.
En tu entrenamiento, la progesterona te ayuda a realizar ejercicios de resistencia.
Los días después de la ovulación es más fácil obtener energía a partir
de las grasas. Por esa razón se suele recomendar hacer rodajes largos de
intensidad moderada, a partir del día 14 del ciclo (ovulación) hasta la
menstruación.
Prolactina
Es la hormona de la leche. Se encarga de provocar la producción de la leche después del parto. No interviene durante el entrenamiento, más bien es la responsable de que te quedes en casa mirando con cara de embobada a tu bebé, en vez de ir al gimnasio.
FSH y LH
Las hormonas gonadotrópicas son, la Hormona Folículo Estimulante (FSH) y la Hormona Luteinizante (LH) Se producen en el cerebro, en la glándula pituitaria. En las mujeres, la FSH se encarga de estimular los folículos ováricos para la maduración del óvulo y favorece la secreción de estrógenos.
La LH
provoca la ovulación al desencadenar la liberación del óvulo desde el
folículo ovárico. También favorece la secreción de progesterona. En el
hombre la LH favorece la producción de hormonas sexuales masculinas en
los testículos.
Testosterona
La testosterona no es una hormona exclusiva en los varones. Las mujeres fabrican testosterona en los ovarios y en las glándulas suprarrenales. Está implicada en el mantenimiento del apetito sexual de la mujer y de la masa muscular,
entre otras funciones. Una buena noticia para las mujeres deportistas,
cuanta mayor es tu porcentaje de masa muscular, mayor cantidad de
testosterona fabrica tu cuerpo, por lo que ahora ya sabes porque tienes
más ganas de (ya sabes) después de hacer pesas en el gimnasio.
Oxitocina
Es la hormona que se encarga de producir el parto, pero también es la responsable de los movimientos rítmicos y placenteros del útero cuando se alcanza el orgasmo. También parece asociada a la sensación de felicidad y enamoramiento de los primeros días de una pareja.